Lectura: 1 minuto
Hace años, un hombre de pueblo llamado Ávalos, pudo comprar su primer auto en momentos que este tipo de máquinas eran una novedad de la época.
El pueblo estaba convulsionado. Realmente estos primeros bólidos eran muy costosos y terriblemente lentos. Un carro tirado a caballo y hasta una buena bicicleta podía andar a mayores velocidades.
Con el tiempo, alguien se acercó en confianza y le dijo: "¡Andando a esa velocidad no va a llegar nunca!"
El sabio sin dudar le contestó: "es que yo no ando por llegar". "Ando por ir"
El viaje y el momento es lo que vale para que el disfrute de hoy sea completo al 100%.
Otra de la tantas frases que suenan en nuestros oídos y desde pequeños es la de la "carrera" que debemos seguir para ser "algo".
Uno se prepara para ser un profesional, no para competir a llegar a algo.
Y en definitiva y salvando a nuestros tutores, nadie nos prepara para ser mejores personas que es lo más importante, porque es la vida la que nos enseña en el camino.
Y nos dicen que tenemos que ser algo en la vida. ¿No debemos ser alguien?. Cuidemos el vocabulario. Hablamos de intenciones del lenguaje y de la prodigiosa educación que nos dieron nuestros padres y que no son otra cosa que la que viene con carencias desde su propia infancia.
La escuela por otra parte no plantea nuevos esquemas de pensamiento; los padres están atareados con su trabajo por conseguir más dinero, cuidar el trabajo o tener más éxito y la sociedad de consumo -por suerte no toda- valora a las personas por lo que tienen, no lo que son.
Estás distintas formas de medir el tiempo, el poder, la comodidad, la calidad de vida: ¿No son motivo de una urgente reflexión individual para ser un poco más felices y no perder tiempo sufriendo?
Las responsabilidades de nuestros actos dependen parcialmente de la educación que nos impartieron de pequeños...pero con el resto: ¿Salimos corriendo a hacernos cargo?
En este mundo tan competitivo que hemos construido generación tras generación, en el punto en que el
ResponderEliminaréxito profesional social y económico, son los objetivos a alcanzar, haciendo licenciaturas, másters, doctorados, más márteres, varios idiomas, cursos para hablar en público, cursos especializados en ventas en relaciones públicas. etc. para acceder a un puesto de trabajo, muchas veces muy por debajo de esos méritos, y luego una lucha por consolidarlo, no dejan sitio para la formación humana y espiritual que requiere todo ser humano para su equilibrio psicológico.
El reultado es una gran insatisfacción como ser humano, que tiene todo lo que se puede desear y no es feliz.
Y de eso la clínicas psicológocas están llenas.
Debemos, como siempre empezar a preocuparnos de reeducar la sociedad en el núcleo, en la
familia, y haber si poco a poco, podemos volver a construir la verdadera cadena de valores que puedan hacer el hombre más feliz.
Si prescindimos de tantas "necesidades" materiales, tal vez podamos trabajar menos horas y estar más tiempo con nuestros hijos, dándoles más atención, cariño,más de nosotros mismos, es lo mínimo que les podemos ofrecer.
Rectificar es de sabios, siempre estamos a tempo.
Discúlpenme por favor si mi anterior comentario estuvo caústico. Alentado por la objetividad del comentario que me precedió quise hacer notar que el cuerpo de la investigación no se correspondía con la conclusión. Por otra parte la confianza que me inspira el espíritu evolucionado del blog también contribuyó a mi manera de comentar.
ResponderEliminarEn cuanto a esta edición es notorio que hemos pasado a ser esclavos del tiempo, cuando el tiempo debería ser un recurso que se someta a nuestros requerimientos. Actualmente para contrarrestar este fenómeno hay propuestas como los restaurantes de comidas lentas y ciudades lentas.
Me gustó tu inteligente reflexión. Saludos. TAl vez nos hayan inculcado unos valores equivocados para ser felices. Sólo quieren personas anodinas que perpetuen sus estupideces.
ResponderEliminarQuerido Tendencia, hace rato largo que estoy en tu página, sin ganas de irme y sintiendo una satisfacción enorme, por afinidades en posturas de vida y enfoques similares frente a temáticas que merecen una atención urgente.
ResponderEliminarNo son todos pero sí cada vez son más los que empiezan a cuestionarse un cambio y tratar de transmitirlo.
Es un placer estar en tu espacio. Siempre.
Te mando un beso grande, como siempre fiel seguidora, pero ahora con credenciales, ¡al fin logré suscribirme!, que por alguna falla técnica en mi blog no podía.
Besos hasta las montañas desde tu propio lugar inspirador y tan vital para nosotros, tus lectores.
Patricia
Hola Marcela: Comparto en cuerpo-alma y espíritu tu post. Lo he vivido en mis propias carnes, hasta que como muy bien dices: asumí absolutamente la responsabilidad por mi mismo.
ResponderEliminarMi blog, como puedes comprobar, está destinado a ayudar, humildemente, a aquellas personas que esten dispuestas a responsabilizarse de su propia salud. He compartido mi experiencia como asesor holístico con muchas personas interesadas en la autosanación y el autoconocimiento, a través de, nuestro cuerpo-mente. También tengo un libro publicado: Conocernos, que es como una guia, para que las personas puedan averiguar de una manera sencilla, las causas emocionales de sus afecciones.
Actualmente estoy trabajando en otro libro que trata sobre el carácter humano: sobre esa parte de nosotros que se encarna para que tomemos consciencia y trabajemos en su integración.
Para mí es un honor que menciones mi blog en el tuyo, ya que así habrá más personas que tendrán la posibilidad de visualizarlo.
Te mando un gran abrazo: Joman.
Luna: tu luz nos permite que rectifiquemos nuestra actitud. Es de sabios. Besos
ResponderEliminarDilman: no hay de que disculparse. ¡Qué buen tema el del Slow Food!
Otra nueva corriente que toma más adeptos. Abrazo
Wig: gracias por tus palabras. ¡Te cambio 10 kilos de mis palabras inteligentes por 1 gramo de tu sabiduría!. Abrazo
Patri- Paper: siempre estás presente. Espero poder encontrarnos para seguir de tertulia.Quiero más. Sos una persona adorable con una familia estupenda. Te mando abrazos y hasta pronto!
Joman: Gracias por tus palabras.
Tu obra demuestra que existe un cuidado equilibrio entre el conocimiento y la sabiduría en favor de la salud y eso lo hace destacable, diferente, atractivo.
Seguiremos en contacto para conocer con mayor detalle los secretos de tu investigación. Abrazo