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Considerado el padre de la autoayuda, Ralph Waldo Emerson fue quien generó una linea de pensamientos inspirados muchos de ellos, en la filosofía oriental y hoy en día, muchos especialistas del pensamiento positivo lo toman como referencia.
De principios éticos y un mensaje de fácil lectura para cualquier tipo de público, destaca que el éxito reside en la confianza en uno mismo, ser perseverante y tener una conducta disciplinada.
"No existe persona en el mundo tan imperfecta de la que no podamos aprender algo".
"Es posible abandonar, pero jamás debemos abandonarnos".
"El pensamiento es valioso. Solo si es la antesala de la acción justa y creativa".
"Nunca podremos mejorar el mundo si no nos mejoramos nosotros mismos".
También pienso que siempre algo de los demás, y esto lo tomo así desde hace muchos años. Inclusive, de las situaciones.
ResponderEliminarPor otra parte, hago como un filtro personal mental: dejo pasar aquello que me sirve y descarto automáticamente lo que no me sea productivo.
También creo que aún en las peores experiencias de vida, se aprende algo. Tal vez en el momento no lo vemos, pero algo positivo se saca...
Be positive!
Un beso, TV
Perdón, me faltó algo en la primera frase.
ResponderEliminarEs así:
También pienso que siempre se aprende algo de los demás, y esto lo tomo así desde hace muchos años.
Hola Tendencia, creo que la confianza en uno mismo es la clave para que la perseverancia se dé naturalmente.
ResponderEliminarVamos a insistir en aquello en que creemos a pesar de malos momentos. Navegar con confianza aún en plena tormenta, te capacita para ver el beneficio de una experiencia cuando se llega a aguas mansas.
Muchas veces es casi un privilegio haber vivido una dificultad, es un referente para nuestras apreciaciones.
Concuerdo con Marcela sobre el aprendizaje y en no insistir sobre lo que no vale la pena!
¡Quiero leer sobre este señor!
Besos
Patricia
Marcela y Patricia:
ResponderEliminarCada uno tiene momentos de tempestades y calma chicha.
La procesión va por dentro y el conocimiento te permite saber como direccionar la vela para llegar a buen puerto.
La madurez y sabiduría, conocernos y no alborotarnos con el primer salpicón del océano.
La brisa y el agua que refresca nuestro rostro entumecido, no es otra cosa que una clara demostración que estamos visos!
Besos