29 de junio de 2008

Buda y el Dhammapada


Lectura: 4 minutos

Reconozco mi afinidad por la milenaria espiritualidad oriental, que se suma y confluye en una misma esencia con el resto de las religiones.
Viajando por China, Bangkok, Hong Kong, Singapur y Bali, descubrí el compromiso que pone diariamente a sus prácticas el hombre común con sus reverencias y amor hacia sus pequeños altares hogareños, sus prácticas de meditación, oraciones, su alimentación, la salud y el valor del "aquí y ahora". Esa actitud de encanto se percibe en el modo calmo que los hace transitar despreocupados de manera noble y despierta.

Las enseñanzas de Buda -que significa el despierto- se encuentran como síntesis en el Dhammapada (Camino de Doctrina). Es la obra ideal para quienes desean interiorizarse sobre la filosofía budista.

Todos los temas desarrollados por Siddartha Gautama, hacen foco en las leyes del universo, el saber vivir en armonía y con sabiduría para convivir con ellas sin causarnos daño en nuestro destino.

Desarrolla mediante preguntas y respuestas originadas por sus discípulos, aspectos vinculados con la mente, la sabiduría, el mal, el apego y la felicidad.

Es un manual de principios éticos que mediante versos mantiene un espacio de privilegio cada vez mayor en la cultura occidental.

En síntesis, la obra orienta al hombre común sobre el verdadero sentido de la vida.

-El hombre que se conoce y tiene control de si mismo, será felíz. El resto vivirá en un permanente estado de insatisfacción y sufrimiento.
-Existen energías negativas que se reflejan en nuestro estado emocional y que obstaculizan nuestro sendero: el deseo, el apego, la estrechez mental, el orgullo, la envidia y la avaricia.
-Cuando deseamos mantener entre nuestras pertenencias a personas y cosas surge el sufrimiento y el miedo en un contexto donde todo es impermanente. Lo único permamente es el cambio.
-La falta de felicidad es producto del deseo. Sin deseo, carecemos de ese tipo de sufrimientos. No hay ansiedad porque no se espera aquel deseo. Si obtuviéramos algo que deseamos, inmediatamente dejaríamos de desearlo y nace otro nuevo deseo que se transforma en nuevas ansiedades y frutos de infelicidad.
-Todos los estados se inician en la mente y la práctica espiritual tiene que ver con el compartir vivencias en nuestro contexto de pertenencia: familiares, amigos y lugar de trabajo. Es ciertamente difícil el desafío.
Un practicante solo y aislado del mundo en una cumbre, seguramente no tendrá conflicto con sus semejantes.
-El odio genera odio y hay que ser perseverante en nuestro camino de práctica frente a críticas y sin esperar el reconocimiento de terceros.
La esencia del Budismo se describe con las cuatro nobles verdades:

1) El sufrimiento es inherente a la vida.

2) El deseo produce sufrimiento.

3) El sufrimiento puede controlarse.

4) Para controlar el sufrimiento que es sinónimo de deseo, debemos manejarnos con un sendero que nos lleva a :

- conocer las cuatro nobles verdades.

- mantenerse en equilibrio sin deseos y sin odios.

- no hablar en exceso ni mentir.

- no matar, robar o herir.

- trabajar para ganarse la vida sin perjudicar a terceros.

- reprimir los malos hábitos y promover los buenos.

- Meditar con disciplina.


"El dolor es inevitable, pero el sufrimiento es opcional"

Leer Dammapada

4 comentarios:

  1. Anónimo9:07

    Vivir en armonía no es fácil; es un aprendizaje y un camino que nace de la propia convicción de seguirlo y emplearlo.
    Lo que puedo decir con respecto a este post, es que realmente me gusta y mucho; si bien no conozco demasiado de esta filosofía milenaria.
    Gracias por compartir tus experiencias y más aún, de viajes tan memorables.

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  2. Marcela: generalmente acumulamos mucho conocimiento para sociabilizar, destacarnos y ser culturalmente seres globalizados.
    Pero en nuestro ser interior, solemos tener poca luz. Estamos llenos de confusión y poca felicidad. La iluminación se presenta a partir de reflexiones y prácticas que elevan al individuo.
    A la lucha personal por tener actitudes sanas, nobles y solidarias, se suman nuestros entornos más cercanos, que pueden conflictuar nuestro proceder, objetarlo y hasta discriminarlo sin comprendernos. Eso nos generará molestia. Debemos ser perseverantes y mantenernos firmes en nuestra búsqueda.Por el bien de uno. Para asegurarnos un destino justo. Por el bien de todos. Un beso

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  3. El haber estado en contacto con gente que a través de su búsqueda logró el equilibrio en su vida, debe haber causado un impacto fuerte en la tuya. Sería tan interesante leer tus crónicas de viaje, aunque estas reflexiones indican que forman parte de tu experiencia.
    No conozco el Budismo en profundidad, pero sin dudas lo que expones, merece toda nuestra atención, más aún si nos sentimos afines a una filosofía de vida donde la espiritualidad tiene tanto peso y efectividad.
    Un beso
    Patricia

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  4. Patricia:creo que el viaje se presentó en un momento justo de mi vida. Tuvo el encanto del del viajero (arte,cultura, filosofía)y un costado de suma curiosidad que me acompaña desde chico y me permite observar detenidamente las cosas e ir descubriéndoalas.
    En realidad me confieso un practicante que recien se inicia en
    un camino de aprendizaje, aprendiendo de las religiones en general y desaprendiendo de algunos legados que nos imponen.Un beso

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